Reconocemos que en los últimos años se le ha dado prioridad al orgasmo femenino, debido a que las mujeres suelen tener menos orgasmos (61.6%) que los hombres (85,5%), sin embargo creemos conocer y damos por sentado el orgasmo masculino como algo simple, sencillo y que solo se experimenta por penetración y eyaculación. Esta es una de las mentirillas más comunes, gracias a la industria porno, el cine, y el entretenimiento, haciendo ver al orgasmo masculino como algo tan básico y limitado.

Pero, ¿y si vamos más allá?

No queremos obviar las cosas, ya que claramente hay hombres que desean conocer mucho más su sexualidad, explorar su cuerpo y reconocer que tienen excelentes capacidades para alcanzar el orgasmo masculino y así experimentarlo desde diferentes perspectivas.

Gracias a diversas investigaciones, conocemos que el placer a la hora de un orgasmo masculino es mucho más efímero y corto que el de una mujer, pues nosotras podemos alargarlos hasta los 20 segundos, mientras que normalmente un hombre puede llegar a los 10 segundos.

¿Siempre es así?

No, de hecho hay TANTOS mitos al respecto, mucha falsa expectativa, y limitaciones de que un hombre puede solamente orgasmear y sentir placer por medio de la estimulación del pene. Cuando en realidad el cuerpo humano en general está hecho para sentir placer, empezando por la piel que es el órgano más grande del cuerpo, que además cuenta con más de 5,000 receptores sensitivos, placer asegurado.

Así que las limitaciones son solo producto de una carencia de conocimiento sobre la anatomía placentera de nuestro cuerpo. Les propongo a todos los hombres que lean este post, que se permitan y abran la mente para aprender más de sus orgasmos y por ende tener una vida sexual más plena consigo mismos y su pareja.

💡 Secreto #1 – El orgasmo masculino y la eyaculación no siempre van de la mano

Las leyendas cuentan y afirman que eyacular es lo mismo que tener un orgasmo masculino. Esta sin duda es de las más frecuentes, y ya hemos hecho un artículo hablando al respecto. Es fake, pues la mayoría de las veces que se eyacula si se produce al alcanzar el orgasmo, sin embargo los hombres pueden llegar a la eyaculación sin ni siquiera haber logrado el clímax, y así mismo pasa con el orgasmo masculino sin necesidad de eyacular.

De hecho existe algo llamado, orgasmo seco -o retrógrado- , en los que el semen entra en la vejiga en lugar de en la uretra, son un hecho común en ciertos hombres. Es poco frecuente y ocurre cuando el cuello de la vejiga no se cierra, lo que hace que el semen vuelva allí antes de salir del cuerpo durante la eyaculación.

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💡 Secreto #2 – Los hombres pueden fingir un orgasmo

Así tal cuál lo lees, es muy común encontrar este comportamiento en las mujeres, pero un hombre también puede llegar a fingir un orgasmo masculino -debido a la misma falsa creencia que el eyacular es sinónimo de orgasmo-. Además un estudio realizado por la Universidad de Kansas, afirma que el 28% de los hombres a lo largo de su vida sexual han fingido en algún momento un orgasmo.

Según la investigación, dice la doctora Muehlenhard que el motivo principal es el mismo de las mujeres -en su mayoría- y es que lo hacen por no lastimar a la pareja sexual, o por vergüenza al no poder alcanzar el orgasmo masculino ya sea por estrés, agotamiento, incluso por el beber alcohol -lo que incapacita la capacidad de llegar a el-.

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💡 Secreto #3 – Los hombres también pueden ser multiórgasmicos

Creíste que solo era cosa de chicas? Pues te cuento que los hombres tienen las mismas capacidades orgásmicas, esto posible gracias a diferentes maneras de orgasmear, y sí, es completamente real si se entrena. Un hombre multiorgásmico debe ser capaz de alcanzar el clímax sin eyacular. El periodo refractario se reduce con el tiempo gracias al entrenamiento y la experiencia. El ejercicio, que deriva del conocido sexo tántrico, exige una intensa concentración.

También hay que tener en cuenta otros aspectos físicos, como el grado de excitación, los niveles de estrés o la conciencia del propio cuerpo, para conseguir muchos orgasmos seguidos durante el sexo (aunque algunos hombres se recuperan de forma natural más rápidamente entre orgasmos). No olvidemos que el orgasmo de próstata, que se da a la estimulación del punto P, una zona bastante placentera que si se estimula correctamente el placer será inmenso provocando el orgasmo masculino, y siendo un excelente complemento para el placer sexual.

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💡 Secreto #4 – Es posible entrenar para tener orgasmos masculinos más potentes

Así es, puedes ejercitar el músculo que provoca el orgasmo para que sea más potente. El músculo que sujeta todos los órganos pélvicos se llama pubococcígeo (PC), y está situado entre el hueso púbico y la base de la columna vertebral. Para dejar de orinar, se contrae el músculo.

Para entrenar el cuerpo para tener mejores orgasmos masculinos nos referimos a los ejercicios de Kegel, que es conocido por promover en la salud sexual femenina para reforzar los músculos del suelo pélvico. Sin embargo los chicos también pueden realizarlos, ya que todos tenemos el músculo pubococcígeo. La recomendación es realizarlos mientras se está acostado. Basta con apretar la zona durante tres segundos y luego relajarla durante otros tres. Hazlo tres veces al día, tres veces al día.

💡 Secreto #5 – Las fases del orgasmo masculino

Cuando se trata de la intimidad sexual, en los hombres se presentan -por lo general- 4 fases que siempre suceden antes del clímax. Comienza con la excitación. La erección se produce por una señal que el cerebro envía a los órganos sexuales en respuesta a un estímulo físico.

➡️ En ese momento, la sangre llena el órgano genital masculino porque las arterias de su interior le permiten fluir hasta 50 veces más rápido de lo habitual. Cuando esto ocurre, las venas del pene se contraen, permitiendo que fluya más sangre en su interior, reforzando la erección, y los músculos de todo el cuerpo se tensan.

La meseta, o segunda fase, puede durar entre 30 segundos y dos minutos y es cuando el cuerpo se prepara para el orgasmo. Tanto el ritmo cardíaco como la tensión muscular aumentan. Puede comenzar el flujo de líquido preeyaculatorio.

El orgasmo propiamente dicho, que tiene dos momentos -la emisión y la eyaculación- es ya la tercera fase. Cuando se alcanza el clímax y el semen se deposita en la parte superior de la uretra, es la primera. La eyaculación se produce tras muchas contracciones de los músculos del pene. Los nervios que las provocan son los que permiten al cerebro recibir señales de placer.

Finalmente, se experimenta una sensación de completa relajación cuando el pene empieza a perder rigidez y la tensión muscular desaparece. Los hombres jóvenes suelen experimentar una fase refractaria o de recuperación que dura menos de 15 minutos, mientras que los hombres adultos suelen experimentar este tiempo entre 10 y 20 minutos. Es esencialmente imposible que se produzca una nueva erección en este periodo.

Espero que con este blogpost hayan quedado resueltas las dudas, y que por fin dejemos a un lado las falsas creencias con respecto al orgasmo masculino. Sé que vamos poco a poco en el descubrimiento, y si surgen más, aquí estaremos hablando al respecto.

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